Todos deberíamos venir con un una fecha de expiración. Depronto así no dolería tanto cuando llega la muerte, de manera tan repentina como suele suceder. Depronto así valoraríamos más cada respiro, cada instante y a las personas que están a nuestro alrededor. Depronto así no haríamos o dejaríamos de hacer cosas de las que luego nos arrepentiriamos. Depronto podríamos despedir con una gran fiesta de despedida y muchos besos y abrazos a quien se va...
Esta es la primera vez que alguien que quiero tanto, se me muere así no más y aunque sé que está mejor donde esté que acá y que no está sufriendo... no puedo evitar llorar, quebrarme por completo... volverme un charco de lágrimas. Sigo en shock. Lloró sin control... me calmo y luego sigo llorando... No entiendo, no es justo... era un angel terrenal, defensor de los animales y la tolerancia con mucho por hacer aún. Se fué un buen amigo... una buena persona... y quisiera poder haberle dicho todo lo que pensaba de él.
No es justo, no era tiempo, no lo creo... no lo puedo entender.
Dudo mucho que donde estés tengas internet, pero espero que sepas que siempre tendrás un pedacito de mi corazón y que siempre te guardo en mi mente, en mis recuerdos, en mis fotos y en mis letras y que dejarás un vacío gigante, un cráter en todos los que te conocieron y te amaron. Siempre fuiste y serás inolvidable Sebastián...ya no se que más decir, y la verdad, ya no puedo escribir mas... vuelven las lágrimas a los ojos y los gritos ahogados al pecho...